domingo, 14 de junio de 2009

NORMAS PARA EL MONTAJE II

DE COMPONENTES

Montaje de hilos y cables

El hilo o alambre «desnudo» que se va a emplear para enlazar sobre el circuito impreso los puntos que lo requieran, se cortará con el alicate de 'corte, a la medida necesaria, efectuando un doblado en cada extremo de una manera análoga a la realizada con los terminales de componentes. Las porciones de alambre, así obtenidas y denominadas «puentes» quedarán aptas para su montaje, pudiendo procederse a realizar éste sin mayor dificultad. Los cablecillos necesarios para la interconexión entre circuitos impresos o entre éstos con los componentes situados fuera de los mismos, deben ser cortados a la longitud precisa, eliminándose después un trozo de la cubierta aislante de los extremos, operación denominada «pelado», en una longitud de 4 ó 5 milímetros aproximadamente. Para ello se utlizará un alicate o tenaza de pelar adecuada, teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones:

— El alicate deberá estar perfectamente ajustado al diámetro del conductor para que únicamente se corte la cubierta, evitando cortar éste de forma inadvertida.

— No deberá quedar deñado el conductor en ningún punto, para evitar riesgos posteriores de roturas.

— Se evitará dejar restos de la cubierta en la zona «pelada», con objeto de no tener ningún problema en la posterior soldadura.

En los cables apantallados y coaxiales, una vez que se ha realizado el «pelado» de la cubierta externa, se separará la malla trenzada que forma el conductor exterior, o «pantalla», agrupando todos los hilos de ésta en un punto y quedando al descubierto el conductor interno, protegido con su correspondiente cubierta. Sobre éste se realizará un segundo «pelado», procurando dejar una cierta longitud de cubierta que garantice el aislamiento del otro conductor. Si se trata de un cable paralelo de dos conductores, se separarán primero éstos a lo largo de la distancia más apropiada para la posterior conexión y después se realizará sobre cada uno de ellos las operaciones descritas. .

Tubos aislantes

En muchas ocasiones se necesita añadir a los puntos de conexión de los cables y cablecillos una porción de tubo o cubierta con objeto de cubrir la zona soldada y aislarla eléctricamente de otros puntos próximos, evitando cualquier riesgo de cortocircuito.

La porción de tubo necesaria, debe ser introducida en el cable previamente a la soldadura, desplazándose después hasta cubrir ésta, una vez que se haya enfriado por completo.

Este tubo aislante, se conoce habitualmente con el nombre de «macarrón» y se adquiere en el comercio a la longitud que se desee.

Existe un tipo especial de tubo o «macarrón» denominado 'er-morreirácül. que tiene la propiedad de contraer su diámetro al aplicarle calor. A pesar de su precio, que es superior al de los demás tipos, tiene la ventaja de que una vez que se ha situado sobre la zona deseada se le puede calentar con el soldador u otro medio térmico (evitando el contacto directo) con lo que quedará completamente comprimido y adaptado a la forma del punto de soldadura, obteniéndose una tóíal inmovilidad, imposible de conseguir con otros «macarrones».

Montaje de disipadores

Existen algunos componentes y fundamentalmente semiconductores de potencia a los que es necesario incorporar un radiador o disipador de calor. Este radiador se situará sobre el componente, antes del montaje de éste sobre el circuito impreso, empleando para ello un tornillo de sujeción. En los casos en que sea posible, deberá procurarse que el conjunto componente-radiador quede sujeto mecánicamente al circuito a través del mismo tornillo, conformando los terminales de una forma adecuada y añadiendo un separador de la altura suficiente para conseguir un aislamiento de la placa, debiendo estar realizado, por lo tanto, en un material que no' transmita el calor.

Conviene señalar, por último, unos determinados modelos de transistores y tiristores de ponencia cuyo npntaje se realiza directamente sobre un radiador lo suficientemente grande para que sea capaz de evacuar el calor producido.

Para su instalación, se emplean una lámina de mica que aisla el cuerpo del transistor del radiador y unas arandelas y tubos aislantes con los que se consigue el mismo efecto, sobre los tornillos de fijación y los terminales de salida. Normalmente estos conjun-. tos formados por el radiador y el semiconductor requieren un montaje separado del circuito impreso y se sitúan en una zona del equipo que disponga del máximo de ventilación para evacuar el calor generado.

La interconexión se realiza a través de un mazo de cablecillos hasta los puntos de enlace que les correspondan.

Tanto éste como el resto de mazos de cablecillos empleados en la construcción, deben de estar perfectamente fijados a la caja del aparato, con objeto de evitar cualquier riesgo de rotura o cortocircuito.

Durante las fases de ajuste y puesta en marcha de los equipos, a lo largo del período normal de funcionamiento de los mismos pueden aparecer una serie de dificultades o averías, motivadas por causas con diferente origen, cuya localización y posterior reparación puede sistematizarse con objeto de llegar de una forma más rápida y segura al fallo o defecto buscado.

Las causas de avería más normales en la práctica son las siguientes:

— Cortocircuitos producidos en el montaje, durante la fase de soldadura.

— Colocación inadecuada de algún componente, como puede ser un diodo o condensador electrolítico invertido, un transistor montado aí revés, etc. ,

— Montaje de algún componente que llega defectuoso de origen por algún error cometido por el fabricante.

— Fallo de algún componente durante el funcionamiento normal del equipo, ocasionado por una degradación del mismo que se produce al cabo de un cierto número de horas de funcionamiento.

Esta relación no es exhaustiva, pudiendo existir otras causas de fallo no descritas pero recoge las que, en la práctica, se dan con más frecuencia.

La localización de averías exige el disponer de algunos instrumentos de medida, siendo el Polímetro un elemento indispensable para la práctica totalidad de los casos, con la ayuda en algunas ocasiones de pequeños complementos que amplían sus posibilidades de comprobación.

El sistema de localización de una avería puede ser el siguiente:

— Comprobación de la tensión de alimentación a la salida del rectificador y filtro. Si no existe, se revisará el fusible, se comprobará la continuidad del cable del enchufe, así como la existencia de tensión alterna en el secundario del'transformador. Si todo esto está correcto, la avería estará localizada en los diodos rectificadores o por cortocircuito interno en el condensador de filtro.

— Si esta tensión es correcta se pasará a medir las tensiones de todos los puntos indicados en los esquemas, situados en las uniones de algunos componentes en los que está señalado el valor que debe de tener el voltaje durante el normal funcionamiento.

— Una vez que se ha encontrado un punto que presenta una tensión anómala, se comprobarán uno a uno los componentes que confluyen en ese punto, hasta encontrar el defectuoso. Las probabilidades mayores de fallo se darán en los semiconductores que disipen alguna potencia y en orden decreciente en los semiconductores-que trabajen con menor esfuerzo, resistencias de potencia, potenciómetros de ajuste, condensadores electrolíticos y otros tipos de condensadores y por último las resistencias. Este orden puede ser el que se emplee al realizar la comprobación de los componentes.

— Si en el esquema no existen unas tensiones de referencia anotadas o si se desea comprobar en ..otros puntos no indicados, conviene hacerlo en ausencia de señal, incluso cortocircuitando la entrada con masa. En un circuito analógico (amplificador, oscilador, etc.) los transistores deberán tejier una tensión base-emisor de 0,6 V aproximadamente si son de Silicio y de 0,3 V si son de Germa-nio. Entre colector y emisor existirá siempre una determinada tensión, siempre superior a 1 voltio e inferior a la de alimentación en varios voltios. Si esto no. se da, será a causa de un defecto en el transistor, en la mayoría de la ocasiones.

— En el caso de que se desee comprobar la presencia o no de señales de alta frecuencia en un oscilador, amplificador de F-I, etc., se puede emplear un aro de Hertz conectado a un Polímetro a través de un diodo que rectifica la señal captada y un condensador de filtro. El Polímetro se colocará en una escala de tensiones bajas (1 V ó 3 V como máximo). Al colocar el aro de Hertz alrededor de una bobina se producirá un efecto transformador, captando éste algo de señal y haciendo que el Polímetro indique alguna medida.

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